(ESPAÑOL ABAJO: Activistas acorralados en Colombia antes de las elecciones, Los Detenidos en Cali se declaran en huelga de hambre – Actúa Ya)
Young activists are being detained just days before elections as part of the Ministry of Defense’ “Plan Democracy.” Many are saying that the plan is really an attempted “preemptive coup” to prevent a Center-Left victory, and to crush popular movements who might take to the streets in the event of massive fraud. Nine young people detained in Cali have declared a hunger strike until they are freed.
Please click here to express your outrage and demand that these raids cease immediately and those who are detained by released
By James Patrick Jordan
Activists from Colombia’s major cities are being rounded up and detained as part of “Plan Democracy”, a strategy described by Jorge Luís Vargas Valencia, General Director of the Colombian National Police, at a June 14, 2022 press conference. Vargas said that police were being put in a “maximum state of alert,” because of numerous threats of violence on Sunday’s national presidential elections. Without producing any evidence for this claim, Vargas announced that police would be arresting front line (primera línea) activists on charges stemming from last year’s National Strike. The next day, police arrested at least 26 young people, including twelve in Bucaramanga, nine in Cali, and five in Bogotá. Vargas also mentioned the cities of Medellín, Popayan, and Pereira as places similar raids would take place. This morning, June 16, the nine detainees in Cali declared a hunger strike until they are set free.
In Colombia, the police are under the direction of the Ministry of Defense, and, thus, an extension of the Colombian Armed Forces. Minister of Defense, Diego Molano Aponte said that 320,000 members of the armed forces would be deployed throughout the nation as part of Plan Democracy. Of these, 80,000 will be located in “strategic points” of particular concern. According to Molano,
“The Plan Democracy in this third phase has deployed 320,000 men in two weeks to guarantee the elections, so that the Colombians can vote freely, without fear and without threats. The second proposal is to maintain the security of the 12 thousand polling places, before, during, and after the elections.”
However, the vast majority of threats and acts of violence are coming not from young front line activists from the National Strike, but from paramilitaries and persons associated with Colombia’s right wing. This electoral season has been the most violent in 12 years. It has also been marked by a plethora of irregularities and acts of fraud, so much so that the March congressional elections had to be revised after, among other things, many polling places registered zero votes for the Center-Left Pacto Histórico (Historic Pact), a statistical impossibility. Colombian Army General Eduardo Zapateiro, in violation of the constitution, made a public declaration against the Pacto Historico presidential candidate, Gustavo Petro, yet still has not been disciplined. There have been multiple claims of fraud both in the March elections and the first round of presidential elections on May 29. Allegations of fraud and irregularities against the Petro campaign and the Pacto Histórico have been made without evidence to back them. More evident are the irregularities that are being alleged to the Colombian Right wing.
Rubiel Vargas (no relation to Police Director General Vargas), of the Permanent Committee for Human Rights (CPDH, by its Spanish initials), suggested that we may be witnessing a “preemptive coup” happening in plain sight against the possibility of a Center-Left victory. When asked about this, and about the detentions of young activists, he pointed out,
“All this is against the movement backing the Pacto Histórico. The detentions are all of young people who participated in social protests, what are called the Primera Linea (Front Line). This so-called Plan Democracy is a plan to pressure and intimidate. The majority supporting Petro are young people. These are the targets of the plan. As for the armed persons who assaulted participants in the National Strike, none of them have been detained, because these are the ones called the “gente de bien” (“the good people”). The “gente de bién” are people who in some way or another share the thinking of paramilitaries, even narco-traffickers. Side by side with the public forces, there are videos, photos of them firing on protesters. These come from many protests, and these attacks left many people dead. The ones who committed these homicides are not arrested. On the other hand, the young people, protesting against neoliberal economics, against the entire system—these are the only ones who are detained. They are also mostly Petro supporters. Plan Democracy is a plan to promote fear in the sense that if Petro does not win, and people protest, there will be violent acts against Petro supporters and protestors. And they will blame the young people instead of those who are really assaulting the people.”
Activistas acorralados en Colombia antes de las elecciones, Los Detenidos en Cali se declaran en huelga de hambre – Actúa Ya
A pocos días de la segunda vuelta de las elecciones presidenciales en Colombia, jóvenes activistas están siendo detenidos como parte del “Plan Democracia” del Ministerio de Defensa. Hoy en día, una mayoría de voces denuncia a este plan como un intento de “golpe preventivo” con la intención de evitar una victoria del candidato de centro-izquierda, y para aplastar a los movimientos populares que podrían salir a las calles en caso de fraude masivo. Nueve jóvenes detenidos en Cali han declarado una huelga de hambre hasta que sean liberados.
Por favor, haga clic aquí para expresar su indignación, exigir que estas redadas cesen inmediatamente y que los detenidos sean liberados
¿Estamos asistiendo a un golpe de estado preventivo en Colombia?
Por James Patrick Jordan
Activistas de las principales ciudades de Colombia están siendo acorralados y detenidos como parte del “Plan Democracia”, una estrategia presentada por Jorge Luís Vargas Valencia, Director General de la Policía Nacional de Colombia, en una conferencia de prensa el 14 de junio de 2022. Vargas dijo que la policía estaba siendo puesta en “máximo estado de alerta”, debido a las numerosas amenazas de violencia en las elecciones presidenciales nacionales del domingo. Sin presentar ninguna prueba de esta afirmación, Vargas anunció que la policía iba a detener a activistas de primera línea por cargos derivados del Paro Nacional del año pasado. Al día siguiente, la policía detuvo al menos a 26 jóvenes, entre ellos doce en Bucaramanga, nueve en Cali y cinco en Bogotá. Vargas también mencionó las ciudades de Medellín, Popayán y Pereira como lugares donde se realizarían redadas similares. Esta mañana, 16 de junio, los nueve detenidos en Cali se declararon en huelga de hambre hasta que sean liberados.
En Colombia, la policía está bajo la dirección del Ministerio de Defensa y, por tanto, es una extensión de las Fuerzas Armadas colombianas. El ministro de Defensa, Diego Molano Aponte, dijo que 320 mil miembros de las fuerzas armadas se desplegarán por toda la nación como parte del Plan Democracia. De ese total, 80 mil se ubicarán en “puntos estratégicos” de especial interés. Según Molano,
“El Plan Democracia en esta tercera fase ha desplegado 320 mil hombres en dos semanas para garantizar las elecciones, para que los colombianos puedan votar libremente, sin miedo y sin amenazas. La segunda propuesta es mantener la seguridad de los 12 mil puestos de votación, antes, durante y después de las elecciones.”
Sin embargo, la gran mayoría de las amenazas y actos de violencia no provienen de jóvenes activistas de primera línea del Paro Nacional, sino de paramilitares y personas asociadas a la derecha colombiana. Esta temporada electoral ha sido la más violenta de los últimos 12 años. También ha estado marcada por una plétora de irregularidades y actos de fraude, hasta el punto de que las elecciones al Congreso de marzo tuvieron que ser revisadas después de que, entre otras cosas, muchos colegios electorales registraran cero votos para el Pacto Histórico de Centro-Izquierda, lo cual representa un imposible estadístico. El general del ejército colombiano Eduardo Zapateiro, violando la constitución, hizo una declaración pública contra el candidato presidencial del Pacto Histórico, Gustavo Petro, y aún no ha sido sancionado.
Además de las múltiples denuncias de fraude tanto en las elecciones de marzo como en la primera vuelta de las elecciones presidenciales del 29 de mayo, se han hecho acusaciones de fraude e irregularidades contra la campaña de Petro y el Pacto Histórico sin pruebas que las respalden. Más evidentes son las irregularidades que se le imputan a la derecha colombiana.
Rubiel Vargas (sin parentesco con el Director General de la Policía, Vargas), del Comité Permanente de Derechos Humanos (CPDH), sugirió que podríamos estar asistiendo a un “golpe preventivo” que se da a la vista de todos ante la posibilidad de una victoria del Centro-Izquierda. Cuando se le preguntó sobre esto, y sobre las detenciones de jóvenes activistas, señaló,
“Todo esto es contra el movimiento que respalda el Pacto Histórico. Las detenciones son todas de jóvenes que participaron en protestas sociales, lo que se llama la Primera Línea. Este llamado Plan Democracia es un plan de presión e intimidación. La mayoría que apoya a Petro son jóvenes. Estos son los objetivos del plan. En cuanto a las personas armadas que agredieron a los participantes en el Paro Nacional, ninguna de ellas ha sido detenida, porque son las llamadas “gente bien”. La “gente bien” es gente que de alguna manera comparte el pensamiento de los paramilitares, incluso de los narcotraficantes. Al lado de la fuerza pública, hay videos, fotos de ellos disparando contra los manifestantes. Estos provienen de muchas protestas, y estos ataques dejaron muchas personas muertas. Los que cometieron estos homicidios no han sido detenidos. En cambio, los jóvenes, que protestan contra la economía neoliberal, contra todo el sistema, son los únicos que son detenidos. También son en su mayoría partidarios de Petro. El Plan Democracia es un plan para promover el miedo en el sentido de que, si Petro no gana y la gente protesta, habrá actos violentos contra los partidarios de Petro y los manifestantes. Y culparán a los jóvenes en lugar de a los verdaderos agresores del pueblo”.
